Roglic vence en Arrate y es el primer líder de La Vuelta

Primoz Roglic ganó la primera etapa de la Vuelta a España 2020 (Photogomez Sport).Foto: Photogomez Sport

Hace 31 días que se le escapó el maillot amarillo en la penúltima etapa del Tour de Francia a Primoz Roglic. Habría sido, probablemente, el logró más deseado del esloveno. Hace algo más de un año el esloveno consiguió ganar la Vuelta a España y hoy, en la primera etapa de la ronda española, Roglic ha demostrado que ha venido a volver a ganar el maillot rojo después de vencer en Arrate, donde ya se ha visto los ciclistas con los que tendrá que luchar. El corredor del Jumbo Visma sorprendió a poco más de un kilómetro cuando el asfalto ya era en descenso para atacar en el grupo de ocho en el que rodaba. Aprovechó su velocidad para ganar con un segundo de ventaja, más la bonificación, sobre Richard Carapaz (INEOS Grenadiers) y Dan Martin (Israel Start Up Nation). Enric Mas (Movistar) entró el sexto cerrando este grupo y dejando muy buenas sensaciones.

La 75ª edición de la Vuelta a España comenzaba con una jornada de montaña de 173 kilómetros entre Irún y Arrate. El mítico final que se puede ver todos los años en la Vuelta al País Vasco. Un día para que aparecieran los hombres fuertes.

Pasado el kilómetro 5 Rémi Cavagna (Deceuninck Quick Step), Quentin Jauregui (AG2R La Mondiale) y Jasha Sütterlin (Sunweb) fueron los primeros en coger unos metros sobre el pelotón. Después también llegaron Tim Wellens (Lotto Soudal) y Jetse Bol (Burgos BH). Se formaba un grupo cabecero con cinco ciclistas. Intentando llegar a la escapada estaba Aritz Bagües (Caja Rural Seguros RGA), sin embargo, no pudo llegar. El pelotón concedió algo más de tres minutos conocedores del recorrido. Los primeros 70 kilómetros del día eran prácticamente llanos y después eran una sucesión de cuatro puertos de montaña.

La lluvia y el viento se convertían en protagonistas en muchos momentos del día, lo que dificultaba el tránsito de los corredores. El pelotón controlaba la escapada con una diferencia entre el minuto y los dos minutos. A falta de 93 kilómetros se iba al suelo Daniel Felipe Martínez (EF Pro Cycling), uno de los candidatos a la clasificación general. El colombiano sufrió un enganchón en medio del pelotón con sus compañeros de equipo y se fue al suelo. Preocupó su estado porque no tenía buenas sensaciones. Se sentó en el bordillo y pudo retomar la marcha. Parecía falsa alarma. Diez kilómetros después volvió a enlazar con el pelotón.

Tras coronar el Alto de Kanpázar arrancó en la escapada Cavagna buscando irse en solitario. Este movimiento del francés provocó que Wellens cediese y se quedaran cuatro en cabeza. El pelotón, sin embargo, apretaba y tenía a la escapada a menos de un minuto. Después de hacer el primer paso por Eibar, a falta de 36 kilómetros Cavagna se descolgó de la escapada, que tenían 30 segundos de ventaja.

Cuando faltaban algo menos de 25 kilómetros la fuga murió definitivamente, previo al comienzo del Alto de Elgeta. En la subida comenzaron a quedarse grandes nombres como Chris Froome (Ineos), Ion Izagirre (Astana) o Thibaut Pinot (Groupama FDJ). El británico, con el que había muchas dudas sobre su estado, confirmó que venía a la Vuelta a España a trabajar para Carapaz. Tras coronar el puerto comenzó la pelea en cabeza por llegar en las primeras posiciones a arrancar la ascensión a Arrate.

El Ineos Grenadiers comenzó el puerto en cabeza. El grupo reducido se rompió tras un ataque de Sepp Kuss, al que respondieron primero Carapaz, y después Enric Mas. Este movimiento quitó la máscara de muchos como Aleksandr Vlasov (Astana), Tom Dumoulin (Jumbo), Daniel F. Martínez (EF), Guillaume Martin (Cofidis) o David de la Cruz (UAE Emirates). Se formó un grupo cabecero con Roglic, Kuss, Bennett, Carapaz, Mas, Carthy, Martin, Chaves y Großschartner. Los nueve lucharían por la victoria con tres corredores del Jumbo Visma.

Después de coronar Carthy intentó sorprender de lejos, pero Mas salió a tapar el hueco que se abría. Sin embargo, Roglic, a falta de 1,2 kilómetros, atacó en pleno descenso, bien conocedor de la llegada. Nadie siguió su rueda. El esloveno se impuso en Arrate y se convirtió en el primer líder de la Vuelta a España, que echo de menos a la afición vasca en esos pasos de montaña. Roglic vistió el maillot rojo en las últimas once etapas de 2019 por lo que se pone el jersey de líder por duodécimo día seguido. Además aprovechó el descenso para meter un segundo al resto de favoritos, sumado a los 10, 6 y 4 segundos de bonificación de meta. Carapaz, que terminó segundo, dejó muy buenas sensaciones, al igual que Enric Mas, la baza española, que se le vio muy cómodo y con las mismas sensaciones con las que acabó hace un mes el Tour de Francia. Mañana en Lekumberri puede ser una gran oportunidad para una escapada después de los tiempos de hoy o nuevamente para los favoritos debido a que acaba con 17 kilómetros de descenso tras coronar un puerto de 1ª categoría con 9 kilómetros de ascensión.

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