• Vuelta a Burgos 2019
• Crónica

Jon Aberasturi vence sobre los adoquines de Lerma

Foto: Photo Gómez Sport

14 agosto, 201914 agosto, 2019

Pocos días después de su autoritario triunfo en el Circuito de Getxo, Jon Aberasturi (Caja Rural) ha repetido forma y victoria en Lerma, final de la segunda etapa de Vuelta a Burgos. Una llegada en subida, con rampas del 6% y piso adoquinado, donde el velocista vitoriano ha demostrado su superioridad aventajando en 2 segundos a una avanzadilla del pelotón encabezada por el líder Giacomo Nizzolo (Dimension Data).

La segunda etapa de la Vuelta a Burgos tenía 155 kilómetros y unía Gumiel de Izán con Lerma. Una etapa sin ningún algo y con final picando para arriba como ayer antes del gran primer final de mañana en Picón Blanco.

La escapada del día ya se había formado en los primeros 10 kilómetros con cuatro hombres: Matthias Brändle (Israel Cycling Academy), Evgeny Kobernyak (Gazprom RusVelo), Iker Ballarin (Fundación Euskadi) y  Daniel Viega (Kometa). El pelotón tuvo controlada la fuga en todo momento y no le dieron más de dos minutos con el Dimension Data del líder tirando.

A falta de 25 kilómetros la escapada se vio reducida a Brändle y Ballarin, que terminó cediendo 5 kilómetros después. El ciclista austriaco se quedo en solitario cuando quedaban 20 kilómetros y con 1 minuto de ventaja sobre el pelotón. Su aventura se acabó a falta de 2 kilómetros con el grupo lanzado y preparado para afrontar el último repecho.

Un magnifico Aberasturi no dejo escapar la oportunidad e hizo lo que no pudo su compañero de equipo, Alex Aranburu, ayer. El vitoriano saltó con una gran fuerza y se marchó en solitario para acabar venciendo por delante del líder Nizzolo. Al acabar la etapa Aberasturi declaró que «me he situado lo mejor que he podido de cara a la subida final. Lastra ha hecho una labor increíble, sin él no sé si hubiese ganado, posiblemente no, ya que me ha dejado tercero en la última curva, detrás de Grosu y Nizzolo. A 200 metros de meta he visto que tenía buenas piernas y, aunque sabía que se podía hacer largo, he arrancado. A falta de 50 metros he mirado para atrás y he visto que iba a ganar».